La Fórmula SAE es una prueba en la que los estudiantes de ingeniería crean, diseñan, construyen y conducen un coche de carreras. El evento creado por la Society of Automobile Engineers (SAE) surgió en los Estados Unidos hace más de 40 años. En Brasil, la primera edición se llevó a cabo en el 2004, llamándose Fórmula SAE Brasil.

El Equipo Poli Racing, creado en el 2008 por estudiantes de la Escuela Politécnica de la Universidad de São Paulo, para disputar la competencia, está utilizando la tecnología de impresión 3D de  Stratasys (NASDAQ: SSYS) para fabricar partes de su vehículo. Hasta ahora, se han producido dos tubos que dirigen el aire que fluye hacia la parte delantera del prototipo, para refrigerar los discos de freno delanteros. "La impresión 3D tiene la ventaja de combinar   formas más complejas con una fabricación más rápida", explica Pedro Takeuti Veiga de Castro, director de marketing del equipo. "Esto nos permite diseñar piezas más ligeras que sean adecuadas para el uso de prototipos", comenta.

Sin la impresión 3D, los tubos tendrían que fabricarse por medio de moldeo y laminado con fibra de vidrio. “Estos procedimientos, desde la primera etapa, que es la fabricación de moldes hasta la parte terminada, tomarían una o dos semanas, sin embargo, la impresión 3D de las mismas partes, se puede hacer en un solo día. El uso de la tecnología de impresión 3D nos permite probar las piezas del automóvil y mejorar el diseño para la competencia”, explica Castro.

Las piezas se están imprimiendo en una impresora 3D Stratasys F170, en filamento ASA y se utilizarán en el prototipo 2019 del equipo, el FP-11, que en noviembre competirá en la etapa de la Fórmula SAE Brasil en Piracicaba. “El prototipo estará listo para ser probado en agosto. Con las pruebas, se realizarán mejoras y su versión final para la competencia, se mostrará al público en su lanzamiento, mismo que está programado para finales de octubre o principios de noviembre”, comenta Castro.

El equipo participó por primera vez en la competencia en el 2009, cuando obtuvo el sexto lugar, siendo el mejor equipo novato en el SAE Brasil. En su segunda participación, obtuvo el octavo lugar, con 82 puntos más que el año anterior, y en el tercer año, ocupó el séptimo lugar.

Cada edición de la Fórmula SAE Brasil tiene una duración de tres días, durante los cuales los autos pasan por pruebas estáticas y dinámicas, para evaluar el rendimiento en la pista. También se evalúa la presentación técnica de los equipos, que incluye el diseño, costo y estrategias de marketing. En las pruebas estáticas, los equipos deben demostrar detalladamente si el automóvil presentado en el proyecto equivale al vehículo construido. Las pruebas dinámicas se llevan a cabo durante el segundo día del evento.

Todas las pruebas obtienen diferentes puntuaciones para garantizar que el mejor proyecto y coche sea el ganador de la competencia. Los equipos con la clasificación más alta ganan el derecho de representar a Brasil en las competencias internacionales celebradas en Estados Unidos. "Nuestro objetivo este año es estar entre los cinco mejores equipos en la clasificación general", concluye Castro.

“La impresión 3D para las piezas de coches de carrera, es una excelente forma de validar nuestras aplicaciones para la industria automotriz, ya que estas piezas serán sometidas a variables extremas, por lo que no podrían reproducirse de otra forma, además, estas historias de éxito pueden ser mejoradas y aplicadas con clientes. Además, permite a los estudiantes de ingeniería dar vida y poner a prueba sus ideas y proyectos más audaces, abriendo el camino a posibilidades anteriormente inimaginables", dice Anderson Soares, Territory Manager de Stratasys para Brasil.